¿Cómo puede abordarse esta modalidad de rehabilitación en Barcelona?
Es esencial segmentar las claves del negocio y dar prioridad al acabado exterior. En este sentido, la fachada ha de ser uno de los factores de mayor relevancia. Para mejorar su aspecto, se pueden emprender todo tipo de acciones, como llevar a cabo un cambio en la pintura o añadir un toldo. También pueden consistir en la instalación de unas ventanas nuevas, una modificación del revestimiento de las paredes, una reorganización espacial o en añadir juntas en muros y techos. Lo importante es elegir con acierto la reforma que mejor pueda exprimir las posibilidades de la edificación y el negocio asentado.
Otro punto al que hay que prestar especial atención es al de la iluminación. En la actualidad, se pueden encontrar un sinfín de métodos y aplicaciones con los que mejorar este aspecto, así como para ahorrar en la factura energética. Conviene recordar que cualquier reforma que consiga un ahorro en este tema es muy relevante, pues si el local se queda indebidamente aislado, el gasto en iluminación o regulación térmica será muy superior.
¿Cuánto pueden costar estas rehabilitaciones?
Al igual que ocurre con la rehabilitación de viviendas Barcelona, el presupuesto de las obras de rehabilitación de locales puede variar sustancialmente debido a factores de todo tipo, como pueden ser la envergadura del proyecto, el número de obreros que han de llevarlo a cabo o la calidad de los materiales que se vayan a emplear. En este sentido, ha de tenerse siempre presente que, en estas obras de rehabilitación, las variaciones en el precio son directamente proporcionales a cualquiera de los factores citados.
No es lo mismo realizar un simple cambio de decoración que modificar el conjunto de la fachada, por lo que es importante iniciar el proyecto con un presupuesto acordado y definido. Así, el cliente podrá estar al corriente de todo y evitarse muchas sorpresas desagradables.