Rehabilitación de fachadas Barcelona
La rehabilitación de fachadas Barcelona es una labor fundamental que hay que llevar a cabo de vez en cuando, debido a los estragos que causan factores como el paso del tiempo o las inclemencias del clima. Una fachada deteriorada perjudica considerablemente la calidad de vida de las personas que hay en el edificio, además de constituir un serio peligro para los viandantes que caminen alrededor.
¿Cómo hay que abordar estas obras de rehabilitación de fachadas en Barcelona?
Lo cierto es que prácticamente se trata de una rehabilitación integral de edificios en Barcelona, al menos en lo que al exterior se refiere. Las obras pueden ser muy profundas, por lo que siempre es conveniente recordar estos pasos antes de ponerlas en marcha:
Hay que empezar por verificar minuciosamente el estado de la construcción. Para ello, lo mejor es contratar a un profesional que tenga los conocimientos necesarios para efectuar un diagnóstico certero y, en consecuencia, determinar los trabajos que hay que realizar con un asesoramiento detallado.
Para que el proceso se pueda llevar a cabo de forma satisfactoria, hay que partir de un presupuesto bien estructurado y lo más completo posible. Solo con un desglose pormenorizado de todas las partidas de gasto, el usuario tendrá la oportunidad de conocer el alcance de la inversión de dinero que el proyecto requiere y se evitarán desagradables sorpresas durante el transcurso del mismo.
Siempre es conveniente aprovechar estas obras para intentar mejorar la eficiencia energética del conjunto de la vivienda. En este sentido, se pueden actualizar los sistemas de climatización, instalar otros aislamientos o llevar a cabo cualquier otra labor que necesariamente implique cambios en la fachada de la edificación.
¿Qué otros aspectos han de determinarse antes de comenzar estas obras?
Al ser un proyecto de indudable envergadura, tan importante como la ejecución técnica del mismo es conseguir los correspondientes permisos, especialmente de los ayuntamientos. En este sentido, el trámite más generalizado consiste en presentar un proyecto de ejecución firmado por el propio arquitecto, en el que se han de incluir aspectos como la viabilidad y seguridad de la obra.
También se debe rellenar el formulario de solicitud de obra y entregarlo junto a una memoria explicativa de los trabajos que hayan de efectuarse. Todo ello ha de venir firmado por la empresa contratada.
Aunque los trámites cambian en función de cada municipio, hay que pagar tasas, como la Tasa de Prestación de Servicios Urbanísticos, así como otros tributos relacionados con el andamiaje y los contenedores, o el Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras.
